¿Accidente laboral o Terrorismo Patronal?

Un total de 116 fallecidos en accidentes laborales se produjeron durante el primer semestre del año 2007. Esto, considerando, que en promedio unos 20 trabajadores mueren mensualmente, de acuerdo al Programa de Vigilancia Activa de Accidentes Laborales, implementado por el Servicio de Salud del Ambiente (Sesma).

Las autoridades estiman como preocupantes las cifras, pues el año antes pasado en total, hubo 94 muertes.

De acuerdo a la muestra, de los casos, el 63 por ciento son por causa de accidentes del tránsito, afectando a choferes de microbuses, taxis, vendedores, promotores y otros.

La edad promedio de las víctimas fatales bordea los 42 años, en su mayoría son jefes de hogar, lo que provoca situaciones de estrés familiar y la eventual pérdida de la principal fuente de ingresos.

Por ocupación, las muertes relacionadas con el área de la construcción y transporte, encabezan la lista. Mientras que los oficios y labores de baja calificación son más susceptibles de sufrir accidentes en el trabajo.

Sin embargo, la directora del Sesma, Soledad Ubilla aseguró que no significa un aumento de los accidentes laborales, sino que hoy se cuenta con mayor cantidad de datos que se contrastan con la información que recibían las autoridades por parte de las mutuales y aseguradoras.

“Gracias a la fiscalización, hemos descubierto una realidad que estaba escondida y que nadie tomaba en cuenta”, afirmó.

Sin seguro

El estudio reveló que un cuarto de los fallecidos no contaba con un seguro de accidentes del trabajo, mientras que el 25% de los casos no fueron notificados por las mutuales, siendo pesquisados a través del Servicio Médico Legal (SML).

El subsecretario de Salud, Antonio Infante, explicó al respecto, que “según la subnotificación que manejábamos existe un 50 por ciento más de accidentes fatales y de esos un 25 por ciento son trabajadores adscritos a las mutuales, por lo que estos organismos deberían haber técnicamente notificado esa cifra a las autoridades”.

En todo caso, el personero precisó que no existiría una mala intención de parte de estas administradoras, sino que más bien es el sistema de salud el que no detecta estos accidentes que muchas veces quedan como una simple estadística de tránsito.

“El problema es que las más afectados son las familias que teniendo derecho a pensión y a asistencia en el caso de fallecimiento no perciben ningún beneficio”, agregó.