[COLOR=Purple]Las interrogadoras encargadas de obtener información de los prisioneros musulmanes detenidos en la base de Guantánamo intentaron ablandar la resistencia de los sospechosos mediante caricias sexuales, vistiendo minifaldas, ropa interior y en un caso embadurnando la cara de un musulmán con tinta roja diciéndole que era sangre menstrual, según el relato escrito por un ex sargento.
Parte de un borrador manuscrito obtenido por la agencia The Associated Press es considerado un secreto hasta que sea revisado por el Pentágono. Detalla la forma en que el mando militar utilizó personal femenino como táctica física y sicológica para interrogar a los sospechosos de terrorismo.
“Tuve muchas cavilaciones con esto porque los detenidos, sus familias y gran parte del mundo pensarán que esto es una guerra religiosa en base a algunas de las técnicas utilizadas, aunque no sea así”, dijo a la AP el autor, el ex sargento del ejército Erik R. Saar, de 29 años.
Saar confirmó la autenticidad de nueve páginas de borrador obtenidas por la agencia y pidió que no fuera publicado su lugar de residencia para no ser intimidado.
Saar dijo que presenció unos 20 interrogatorios y que unos tres meses después de llegar a Guantánamo le llamaron la atención algunas prácticas “preocupantes”.
Una interrogadora civil usó una minifalda y ropa interior sugestiva para interrogar a los prisioneros avanzada la noche, en su mayoría musulmanes integristas.[/COLOR]
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¿¿¿ hasta donde estamos dispuestos a hacer los seres humanos, por información??[/COLOR]