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En un hecho insólito que muestra lo permeable que aún resulta el sistema Procesal Penal, una mujer entregó una identidad falsa al ser detenida por Carabineros logrando culpar a una persona inocente de un delito que jamás cometió. Pero no sólo ante Carabineros, sino que los engañó a todos y su identidad de “chapa”, la entregó hasta en el Tribunal de Garantía.
Este caso se inició el 30 de noviembre del 2003, luego que la mujer fuera detenida en un conocido supermercado de la ciudad por el delito de hurto. El hecho quedó al descubierto cuando la imputada es captada por la cámara de seguridad del local. Al momento de ser detenida por Carabineros con la especie en su poder, ésta dio un nombre que correspondía a otra persona, señalando que no portaba en ese instante su cédula de identidad, pero sí la señala. Al verificar su domicilio, su identidad es corroborada por su conviviente ante Carabineros.
Con esta identidad y antecedentes fue puesta a disposición del Tribunal de Garantía, donde señaló el mismo nombre y cédula al juez de Garantía y al abogado defensor.
La víctima de suplantación descubre esta situación cuando por razones laborales concurre a solicitar certificado de antecedentes al Servicio de Registro Civil y encuentra que en sus papeles aparecía una condena, haciendo la denuncia pertinente.
INVESTIGACION
La investigación que tuvo a su cargo el fiscal Paredes, quien trabajó en forma conjunta y coordinada con efectivos de la SIP de Carabineros, logró corregir la situación de la afectada. El profesional solicitó al tribunal en base a los nuevos antecedentes nulidad de todo lo obrado y al Servicio de Registro Civil que subsane la situación de la víctima de suplantación.
Paralelamente el fiscal y efectivos de la policía uniformada realizaron un intenso trabajo investigativo agotando diversas diligencias que finalmente lograron determinar que la verdadera identidad de la mujer era Ester Saravia Gómez, quien fue detenida hace unos días y puesta a disposición del Tribunal de Garantía.
El fiscal Paredes formalizó investigación por el delito de usurpación de nombre y hurto en contra de la imputada solicitando la medida cautelar de prisión preventiva, la que fue acogida por el Tribunal de Garantía.
AUDIENCIA
Al término de la audiencia, la mujer, quien registraba cuatro nombres supuestos, fue trasladada al Centro de Cumplimiento Penitenciario Femenino, por cuanto, el abogado del Ministerio Público solicitó la medida cautelar por considerarla un peligro para la seguridad de la sociedad. En tanto el tribunal concedió un plazo de dos meses para el desarrollo de la investigación.
Este hecho no sólo muestra las habilidades de los hampones, quienes utilizan diversas “chapas” para no ser descubiertos, sino también la necesidad de crear un sistema rápido para identificar a los detenidos y establecer rápidamente cuál es su verdadero nombre y evitar que ciudadanos honestos vivan estas pesadillas.
El Ministerio Público, como organismo encargado de la persecución penal tiene la obligación de verificar los antecedentes que le entregan los órganos auxiliares como Investigaciones y Carabineros, como una forma de tener certeza de quién es realmente el detenido, por más que sea un procedimiento rutinario, como en este caso, donde el ilícito era un hurto de una especie desde un supermercado.
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