El Gobierno chino envió una protesta formal contra la Administración estadounidense por la nueva estatua inaugurada en Washington esta semana por el Presidente George W. Bush, que copia a la famosa “Diosa de la Democracia” erigida por los estudiantes de la Plaza de Tiananmen en 1989. El Gobierno chino ha dicho sentirse “ofendido” y se manifestó totalmente opuesto a la colocación de la estatua, no sólo por que recuerda la matanza de Tiananmen sino porque, además, está dedicada a las víctimas de regímenes comunistas. El portavoz de Asuntos Exteriores chino, Qin Gang, aseguró hoy que la estatua es una muestra de que "hay fuerzas…