me permitire hacer un copy paste del articulo que acabo de leer en universia ya que me parecio interesante, en especial para las personas que aun estan estudiando o que ingresaran a la u.
Fuente : www.universia.cl
27/12/2004
Divergencias y acuerdos de la Ley de Financiamiento
Faltan pocos días para que el Proyecto de Ley que establece normas para el financiamiento de estudios de la Educación Superior entre a su última etapa, previo a ser promulgado. No obstante, aún hay puntos en discordia.
El pasado viernes 17 de diciembre se efectuó en la Universidad Católica Silva Henríquez un foro sobre el Proyecto de Ley que establece normas para financiamiento de estudios de Educación Superior y en el que participaron Pilar Armanet, jefa de División de Educación Superior del Ministerio de Educación; Rafael Moreno, presidente de la Comisión de Educación del Senado; Sergio Torres, rector de la Universidad Católica Silva Henríquez y María Isabel Moya, presidenta de la Federación de Estudiantes de la UCSH.
Para entender los descargos que se hicieron durante el encuentro, es necesario hacer un repaso de los puntos fundamentales de esta ley, que establece que el Estado será, por medio del Fisco, quien garantice los créditos destinados a financiar los estudios de la Educación Superior, los que luego serán securitizados y refinanciados en el mercado de capitales.
A su vez, de ser promulgada, permitirá que el financiamiento sea otorgado no sólo a las casa de estudios pertenecientes al Consejo de Rectores sino que también se verán favorecidas las universidades privadas, los centros de formación técnica y los institutos profesionales.
El primero en tomar la palabra fue el senador Moreno, quien se refirió a la expansión del crédito hacia todas las instituciones de la Educación Superior. “La idea es positiva, pero obviamente se trata de una sistema teórico, porque si el proyecto se aprueba como va, serán 5.600 créditos los que se otorguen, cifra que es mínima tomando en cuenta que sólo en la educación más restringida hay 67 mil alumnos. Es decir, estamos en menos del 10%”.
Con respecto al sistema de garantías, el parlamentario también formuló algunos reparos, que se fundamentan básicamente en la alta deserción estudiantil que existe en el país, transformándose “en una acción de debilitamiento del procedimiento. Si esto se produce, muchas universidades pasan a ser cómplices de mantener un modelo en el que se retienen los aranceles y se dejan a alumnos sabiendo que no van a poder ser competentes en lo que los están forzando, porque les interesa el paquete del cheque mensual, lo que empieza a ser parte del sistema de garantías”.
La palabra del Ministerio
En representación del Gobierno estuvo Pilar Armanet, quien defendió el proyecto explicando que “la gran forma de financiar la Educación Superior es el crédito, puesto que existe una mezcla de valores protegidos. Por una parte la comunidad tiene un compromiso de entregar opciones de acceso a la educación superior a los jóvenes, porque la sociedad en su conjunto se beneficia con gente mejor instruida. Chile necesita gente con más y mejor educación”.
Armanet también se refirió a la deserción estudiantil y la creación del nuevo sistema de garantías. “Uno de los mayores problemas es que la puerta por donde entran los estudiantes es enorme y la ventana por la que salen ínfima. Explíquenme qué sistema de crédito funciona si entra a la universidad un curso de 200 estudiantes y sale sólo el 20%. En consecuencia, lo que estamos haciendo con la garantía académica es hacer responsable a la institución de seleccionar bien a sus estudiantes y si no lo hacen, tienen que responder por la calidad de ellos, porque no puede ser que una universidad diga ?yo dejo entrar a todos, sin embargo los apruebo de acuerdo a los chicos que obtuvieron 700 puntos en las PSU?. De la única manera que hemos descubierto que se responsabilicen de ellos, es que les duela de alguna manera el bolsillo”, dijo.
Valoración y déficit del proyecto
Durante la jornada de discusión, el rector de la Universidad Católica Silva Henríquez, Sergio Torres, enumeró los pro y los contra de la promulgación del proyecto, entre los que se encontraban los siguientes puntos:
Beneficios
“Abre acceso a instituciones privadas”.
“Permite notificar al sistema con información válida respecto al desempeño efectivo de las instituciones, porque puede vincularse y traspasarle al sistema datos relevantes”.
“Se refuerza el concepto de crédito”.
Déficit:
“Este proyecto va a consagrar una discriminación en relación al sistema de crédito tradicional. Vamos a tener dos créditos en el país y por consiguiente correremos el riesgo de tener, por parte del Estado, una relación tipo A y B para el estudiante de 18 a 24 años”.
“Hay un tema complejo con respecto a la exigencia de garantías de la Institución de Educación Superior. Con esto se puede desdibujar la relación académica de la institución con el estudiante, es decir que el tema de la deserción en vez de mejorar la calidad de la enseñanza signifique posibilitar que el estudiante egrese a como dé lugar en independencia de sus condiciones académicas. Por otra parte, las instituciones van a tener que seleccionar a quienes representen menores riesgos y no necesariamente a quienes tengan mejores talentos, por lo tanto hay un doble incentivo perverso”.