Un gringo adicto al porno presentó una demanda contra la compañía Apple porque, según él, el computador que les compró tenía libre acceso a los contenidos sexuáles, haciéndolo un adicto a la pornografía.
El hombre de la localidad de Nashville en Tennessee, aseveró en su demanda que el porno había arruinado su matrimonio y envenenado su vida.
El demandante, Chris Sevier, también aseguró en su acusación contra Apple, que Safari en vez de dirigirle a su página de Facebook lo llevaba al portal de pornografía “FuckBook”.
Sevier plantea que si a Apple le interesan de verdad “los valores estadounidenses y el bienestar de los niños del país”, debe vender sus productos en “Modo seguro”. A esto agrega que deberían venir con un software incorporado que filtre los contenidos pornográficos.
La compañía no ha respondido (deben estar riéndose todavía).