Indudablemente la posibilidad de mejorar a los hijos desde el punto de vista biológico trae una serie de cuestionamientos. Una cosa es que se pueda hacer y otra es permitir el “diseño de bebés”, como se le denomina en el ámbito científico.
“La pregunta es si los padres tienen derecho a mejorar sus embriones para que resulten hijos con mejores posibilidades en la vida. Creo que el planteamiento es terrible. ¿Qué padre no va a querer que a su hijo le vaya bien? Y si venimos ahora a venderles un producto diciendo `mire, yo a su embrión le pongo este gen y va a ser mejor´ el asunto adquiere un matiz valórico que es de vital importancia comenzar a discutir ahora”, opina el especialista.
Manuel Santos, genetista de la Universidad Católica afirma que si el diseño de seres humanos se hace en un laboratorio, probablemente habría que ensayar con varios embriones hasta que en uno se logre exitosamente la modificación del material genético. Y agrega que conforme la tecnología avance, tal vez no se necesite usar el sistema in vitro y el procedimiento pueda realizarse directamente en el útero.
El problema radica en si los padres ven a un hijo como un producto posible de manipular y donde se elige el que ofrece mejores garantías o bien se trata de un don que se acepta cómo viene.
Aunque falte tiempo y una buena cantidad de investigaciones para llegar a esto, no está de más plantear la interrogante desde ya.
sera que la ciencia llegue a este punto de pensar en manejarlo todo???