Hola!
Hace tiempo no me aparecía por acá.
Supongo que ya compraste el telescopio, pero igual dejaré algunas recomendaciones.
Primero, una advertencia, en letra grande, casi gritando:
JAMÁS MIREN EL SOL DIRECTAMENTE, NI MEDIANTE UN TELESCOPIO, BINOCULAR, LUPA, VIDRIO
AHUMADO O DEMASES.
DAÑARÁN IRREMEDIABLEMENTE SUS OJOS, INCLUYENDO LA POSIBILIDAD DE CEGUERA TOTAL.
LOS FILTROS SOLARES SON DE MYLAR Y OTROS MATERIALES ESPECIALES Y DEBEN IR EN LA APERTURA DEL TELESCOPIO,
BIEN ASEGURADOS Y NUNCA JUNTO AL OCULAR. ÉSTOS ÚLTIMOS RECIBEN UNA CANTIDAD DE LUZ MUCHO MAYOR QUE LA QUE DEJARÍA PASAR UN BUEN FILTRO EN LA APERTURA Y POR LO TANTO NO SIRVEN!!
Ten en cuenta que de los objetos que podrás ver, casi todos se verán en “blanco y negro” o más bien, escala de grises. Se necesita un telescopio muy grande (o incluso métodos de registro de imagen análogos o digitales) para poder ver siquiera un poco de color, salvo cuando se trata de estrellas, algunos planetas y según se cuenta por ahí, alguna nebulosa con un telescopio grande.
Pero no te preocupes, verás buenas cosas.
-Lo importante es la APERTURA (objective, diámetro): el principal objetivo de un telescopio es captar más luz de lo que pueden nuestros ojos. No es muy útil un telescopio de baja apertura con mucho aumento, ya que estará limitado sólo a los objetos más brillantes y “grandes” (en apariencia en el cielo, claro) y punto.
De los que mencionaste, yo optaría por el de 76mm, ya que el otro es muy pequeño para la obstrucción que tiene por tratarse de un Maksutov, aunque la diferencia es poca considerando que ambos tienen obstrucción.
Lo otro es el trípode y también preferiría el de 76mm.
Recordar que la capacidad de recolección de luz es proporcional al área del espejo. El área de un círculo de proporcional al cuadrado de su radio y por lo tanto, al cuadrado de la apertura.
Ejemplo: la pupila dilatada puede llegar a unos 7mm de diámtero, por ejemplo. (Depende de la persona, algunos 8, otros menos, etc).
En el caso del telescopio, tenemos: (76mm)²=5776mm².
Para el ojo, tenemos: (7mm)²=49mm².
5776/49=117, entonces, con el telescopio de 76mm (sin contar en cuenta la obstrucción) tendríamos 117 veces más luz que la que captamos con un ojo. Ahora, cómo se percibe en realidad la diferencia es otra cosa, ya que la respuesta de nuestro sistema visual tiene sus particularidades, pero 100 veces más luz suena bien si queremos ver objetos débilmente brillantes en el cielo.
50,60 mm para iniciarse, sobre todo si uno no sabe si seguirá con el hobby. Permite ver la Luna, algunos planetas (con bajo nivel de detalle), cúmulos abiertos relativamente brillantes, cúmulos globulares brillantes (sin resolver=distinguir estrellas individuales), estrellas dobles bien separadas y cometas relativamente brillantes. Nebulosas brillantes.
El Sol, CON FILTRO! (Si es que hay de ese tamaño).
76mm mínimo para ver mejores cosas. Lo mismo que antes, pero con mejor detalle y más brillo. Hay que añadir algunas estrellas dobles, nebulosas brillantes, etc.
114mm y 5 pulgadas: Más que suficiente para muchas cosas. Ahora se ven algunas galaxias, los cúmulos globulares tienen mejor definición de estrellas indiciduales, mejores detalles de los planetas, etc.
6 pulgadas: felicitaciones! $500.000-700.000
8 pulgadas: comienza a ser palabras mayores en $, pero ahora sí que sí. Sólo si lo vas a ocupar en serio, que se le puede sacar mucho provecho, vamos. $800 mil, más.
10 pulgadas: cototo cototo. $su guatón y algo
12 pulgadas: verás demasiado. $Guatón y medio, dos
14 pulgadas: WoW! $2,3 guatones yo creo
16 pulgadas: gula y lujuria cósmica. Realmente lo vas a ocupar si pagaste tantos millones por él.
Precio: $Consulte directamente con la empresa… Vario$ guatone$ y no muy portátil.
Marcas.
NO recomiendo (y no se sienta mal el que tenga uno, siempre se puede sacar provecho de lo que se tenga):
Bushnell, Konus, marcas Pepito que venden en librerías y los que dicen 525x
Recomiendo:
Celestron :D: muy buenos en general.
De los Celestron hay algunos discontinuados, como el “Tata Colores” Newtoniano short (de 6 u 8 pulgadas?) con lente corrector interno, que te sacaba todos los colores del arcoiris a lo que no tenía color. Si te lo ofrecen, di amablemente que no.
Meade: ok. (No todos, algunos tienen pésimo rack&pinion (lo que se usa para mover el ocular para enfocar) y algunos otros tubos no tan buenos. Ejemplo: cierto modelo Newton de 5 pulgadas, no recuerdo cuál, y no se si hayan corregido ésto en producciones posteriores.
Orion: me han contado que son bastante buenos! No los he probado pero he recibido buenas referencias.
Takahashi: sólo si tienes mucha plata y te gustan los lentes de fluorita. Una joya japonesa.
Se me quedan otros en el tintero, asi que esos tendrás que averiguarlos.
-Aumentos: el aumento, o magnificación se calcula dividiendo la longitud focal del telescopio por aquella del ocular.
Por ejemplo, en el Orion tienes 700mm/10mm=70 aumentos.
Los límites teóricos de máximo aumento útil se obtienen multiplicando por 50 o 60 la apertura en pulgadas. Ejemplo: 6,5cm/2,54cm=2,559 pulgadas,
luego, 50*2,559=127,95->aprox=128 aumentos. Y aún así es mejor mantenerse bajo el 80% del aumento máximo, ya que a mayor aumento, menor brillo de la imagen y la calidad empieza a bajar.
Hay telescopios de unos 4-5 cm de diámetro que dicen “525x”. Eso es publicidad engañosa.
Oculares: nunca deben ser de plástico, ya que sólo verán malas imágenes e incluso podría alejarlos de las astronomía como hobby. Existen de varias calidades y precios. Los más económicos son los Ramsden y los Huygens y aunque tienen algunas aberraciones (imperfecciones ópticas típicas), pueden brindar bastante diversión, a menos que busques calidad.
Vienen generalmente en 2 tamaños de barril, 0,96" (pulgadas) y 1,25". (Para telescopios algo más grandes hay de 2"). Procura que sean de 1,25", ya que los de 0,96" están en retirada en el mercado y así puedes guardarlos para otro telescopio y compras unos mejores si alguna vez haces upgrade.
El siguiente peldaño en calidad son los MA (modified achromatic) y SMA (super modified achromatic). Generalmente esto bastará.
Luego tienes los Plössl y Ortho. Son mucho más caros pero son joyitas. Eso sí, no se justifican a menos que tengas un buen telescopio. Para los que mencionas bastan los MA o SMA. Sin embargo, para el Makstuov-Cassegrain, podría ser una buena idea que viniesen con Plössl. Nadie se queja
Otra cosa importante es el “eye-relief”. Es la distancia (aproximada) a la cual tienes que poner el ojo
para ver una imagen nítida. Una distancia de eye-releaf alta significa que será más cómodo y no tendrás que pegarte al ocular.
Algunos telescopios vienen con un Barlow. Este es un pequeño sistema óptico (tubito+lentes) que permite obtener mayores aumentos, generalmente multiplicando por 1,25 o 2 la capacidad normal.
Suelen ser de calidad mediocre a media, salvo algunas excepciones. Yo sólo los he ocupado con cierto éxito para la Luna, y algunos planetas, pero no suplen a un ocular de menor distancia focal y/o un telescopio de mayor diámetro.
También hay oculares con zoom. Antes solían ser más o menos, pero han salido buenas cosas que puedes adquirir por el módico precio de unos 130.000 pesos o más. Sólo recomendable si son buenos, tienes un buen telescopio, han recibido buenas críticas (ver revista Sky&Telescope, por ejemplo) y los pruebas satisfactoriamente antes de comprar.
La montura: ojalá que sea firme. Si eliges el National Geographic (sería bueno saber quién fabrica la óptica), por lo que he visto sólo tendrás un pequeño trípode. Eso no te servirá de mucho a menos que éste venga con uno más grande, tengas uno compatible o algo donde apoyarlo. No es cómodo tener un telescopio astronómico de mano, a exepción de los binoculares, que de todas maneras, a pesar de tomarse con ambas manos, pueden marear si uno tiene mal pulso.
Hay tres tipos principales de montura para telescopios aficionados: altazimutal, ecuatorial y dobsoniana.
-La altazimutal te permite los movimientos básicos de girar sobre el eje perpendicular al suelo (como para ubicar los puntos cardinales) y el de altitud, la inclinación del telescopio respecto al suelo.
-La montura ecuatorial es más específica y permite, una vez alineada con el polo sur celeste (o norte, para observadores del hemisferio norte), seguir los objetos tan sólo girando una perilla.
Es más cómodo y permite hacer fotografía con piggyback. Esto último es poner una cámara fotográfica apuntando al cielo, en modo de exposición prolongada (entiéndase indefinida) sobre el telescopio, mediante un adaptador si la montura lo permite, o mediante un invento si no, y utilizar una estrella como guía en el ocular. Alinear este telescopio requiere sabe ubicar el polo (no es tan difícil, incluso después se hace al ojo y casi por intuición) y la latitud local. Las hay simple y alemana, que es más pesada y robusta. La alemana es la recomendada, pero para un telescopio no muy pesado la sencilla está ok.
-Finalmente, la montura dobsoniana es similar a la altazimutal en cuanto a movimientos, pero esta sólo consiste en mover manualmente el telescopio sobre una plataforma giratoria (movimiento azimutal) y un par de “ruedas” de apoyo para la altitud.
El uso: sólo astronomía? Si quieres un uso astronómico, es mejor que tengas una montura adecuada (patas largas, no de mesa). Es muy pesado? Lo transportarás o lo usarás en casa? Esa es otra gran pregunta.
Hay gente que se compra un telescopio gigante pero no tiene cómo transportarlo y queda recluído al uso en una zona con alta contaminación lumínica (enemigo #1 del aficionado y profesional, junto con los flashes y linternas inapropiadas en un star party) y sería…no se le puede sacar el jugo.
Si quieres ver objetos terrestres con igual prioridad, quizás el National Geographic sea mejor.
Algunos telescopios de uso terrestre traen un “coating” (recubrimiento) óptico en el lente principal.
Esto permite tener mejor contraste al observar paisajes, pero puede ir en detrimento de la observación astronómica.
Diseño óptico. Suelen catalogarse en dos tipos principales: refractores y reflectores. Claro, están los híbridos también. Los refractores utilizan un sistema de lentes para captar y concentrar la luz en la zona donde se ponen los oculares. Es el telescopio clásico. Una buena ventaja es que, a diferencia de los reflectores, no presentan obstrucción central (en seguida explico eso). Sin embargo, el precio por una misma apertura en comparación con un reflector suele ser más alto. Algunos pueden presentar aberraciones cromáticas notables. (Esto es, no todos los colores se juntan en el mismo lugar, dando origen a imágenes con bordes de colores). Entrega imágenes erguidas, aunque a veces izquierda y derecha pueden estar al revés, lo que se soluciona (si acaso importa) utilizando un erector de imagen de prisma. (Que puede ser un poco caro; sólo importa si uno quiere ver terrestre y la orientación izq-der es realmente crítica. Para astronomía da casi exactamente lo mismo.
Los reflectores (el más común es el Newtoniano y suelen usarse ambos nombres indistintamente, aunque hay más tipos de reflectores) utilizan un espejo cóncavo (espejo primario) que concentra la luz sobre ellos, la cual es redireccionada hacia una salida lateral al tubo mediante por un espejo (esp. secundario) localizado un poco más abajo que la apertura.
En la apertura se ubica el ocular. Debido al espejo secundario se obstruye parte de la apertura. Si bien esto no hace que veamos imágenes “con hoyitos” cuando está correctamente enfocado, se sacrifica un poco de apertura por luz bloqueada. Por otra parte, los espejos requieren alineamiento periódico (idealmente cada vez que se comience una sesión de observación, aunque también pueden pasar meses antes que sea necesario; es muy recomendable hacerlo si se le transporta) que no es difícil pero toma un poco de tiempo y paciencia, que es muy bien recompensada. Por lo mismo son algo más frágiles en su manejo y transporte.
No hay que preocuparse de rayas, a menos que se caiga algo dentro del tubo o se te ocurra lavarlo o pasarle un plumero. Menos aún usarlo para guardar fustas o huascas de caballo.
Incluso pueden acumular algo polvo y telarañas sin disminuir notablemente su capacidad, aunque no es la idea. Gran ventaja es la relación apertura-precio.
Ya que la imagen se ve totalmente invetida (izq-der,arriba-abajo) es apropiado sólo para uso astronómico.
Los sistemas de corrección de esta inversión suelen no hacer foco, por si acaso.
En telescopios con montura dobsoniana suelen ser populares debido al bajo precio conjunto “espejo-tubo-montura”. El tubo puede ser a veces de cartón. No lo mires a huevo, uno se puede llevar cerda apertura (si se va a usar sólo al ojo, ya que la montura no es adecuada para astrofotografia, salvo por la Luna) por un precio bastante decente por lo general.
Hay unos en formato “short” (sobre todo Celestron) que usan un lente interior para permitir tener una mayor apertura en un tubo más corto. Consulta por la calidad de cada uno, que hay de los buenos y de los no tanto.
Los híbridos, como el clásico Schmidt-Cassegrain, el curioso Schmidt-Newton, el Maksutov-Cassegrain y el apetecible -relativamente reciente para el amateur- Ricthey-Chretien hacen uso de un lente corrector primario que da paso a un espejo posterior (con un agujero al medio) que devuelve la imagen a un segundo espejo soportado al medio del lente corrector (sí, esto resulta en una obstrucción) que a su vez envía la luz por la perforación del primer espejo. Tanto enredo permite imágenes con muy poca distorsión o casi carentes de aberraciones (cromática, coma, astigmatismo, etc).
Suelen venir acompañados de buenos oculares y suelen ser muy buenos, salvo excepciones.
Nunca apuntar al Sol siquiera rasantemente sin filtro apropiado, pues explotan diligentemente, llevándose por los aires tus 1,1 a 5 millones de pesos. (O más). (Y quizás te dejarán una que otra marquilla).
Recomendable sólo para fanáticos o aficionados serios (no seriotes!), clubes de astronomía e incluso para docencia. Son “la crema de la crema” y entregan imágenes de altísima calidad si están bien enfocados y ajustados. Requieren extremo cuidado al transportar y bastante espacio.
Filtros: los más comúnes son el filtro lunar y el solar. Ojo con la advertencia de arriba.
El filtro lunar sirve para observar la Luna sin que moleste su brillo, pues de no ussarlo te podría dejar “la Luna en el ojo”, algo bastante molesto y quizás dañino si el telescopio tiene gran apertura y la Luna está muy brillante.
El filtro solar, reitero, debe ir en la apertura del telescopio (la entrada principal de luz), debe estar hecho de un material apropiado (como el Mylar, que ahora está siendo reemplazado por otros materiales mejores y más robustos). Debe filtrar la mayor parte de la radiación infrarroja y óptica, así como la ultravioleta). Ve las páginas de Celestron y Meade.
Otros filtros son aquellos de colores, los filtros nebulares, neutral density, filtros de cielo nocturno, etc.
Casi dentro de esta categoría están los polarizadores, que tienen otras propiedades pero con buen uso, telescopio y experticia se les puede sacar más provecho.
Razón focal (o número f/#): es el resultado de dividir la apertura por la distancia focal. (Aquí, como en los cálculos anteriores, recuerda utilizar las mismas unidades de medida al hacer esta operación, es decir, no dividir, por ejemplo, 3cm/4,5mm.) Esto da una idea de qué tan “rápido” (así se le dice, por razones que vienen de la fotografía y del uso del telescopio como lente de cámara) es el telescopio.
Un f bajo implica bajo aumento, pero que podrás ver imágenes más brillantes. Es lo recomendable si uno quiere dedicarse a ver nuebulosas, galaxias, etc.
Un f alto implica que tendrás mejores aumentos, pero menos brillo. Es lo aconsejable si quieres más que nada ver planetas, que ya son por lo general suficientemente brillantes, y te pude permitir tener una mejor visión de los anillos de Saturno o de las bandas atmosféricas de Júpiter, así como algo de detalle de la superficie de Marte a gran escala. Desde luego que verás mejor la Luna, también. Un telescopio con alto f/ es bueno si la apertura es suficiente. ¿Qué es suficiente? Depende de lo que uno quiera ver.
Hay varios otros detalles que merecen atención, pero no tengo más tiempo ahora para describirlos.
Te recomiendo que vayas a una star party (ve la página de Mundo Astronómico, por ejemplo, y tal vez la de Achaya), para sepas qué se puede ver con distintos equipos.
Si estás seguro que te dedicarás a observar con frecuencia, te recomiendo intentar adquirir un telescopio de 114 mm de apertura.
Si por x, y o z motivos no puedes adquirir un telescopio, unos binoculares pueden ser muy útiles.
Yo tengo unos Celestron UpClose 10x50 (10 aumentos y 50mm de apertura en cada lente) y me han salido buenísimos.
Los binoculares con un recubrimiento rojizo o amarillo sólo son para lugares con mucha luz, no infrarojos, por si acaso. Los infrarojos están vedados y limitados sólo a uso militar, por lo que sé.
Aparte de poder utilizarlos alegremente en el cerro, podrás ver la mar de objetos interesantes en el cielo, sobre todo cúmulos abiertos y nebulosas brillantes, más uno que otro cúmulo globular, la galaxia Andrómeda y las Nubes de Magallanes, sin dejar de lado los cometas.
Finalmente recomiendo ir a Mundo Astronómico para obtener mejores referencias, detalles y la opinón experta y 5 veces reverenciable de María Paz.
Y casi lo olvidaba, también te puedes fabricar tu propio telescopio.
Ve a Achaya o mejor aún consulta con Los Telescoperos. (Googlea).