Seguimiento Kinésico del Niño Prematuro

Esto es en relación a los pacientes que presentan Displasia broncopulmonar (DBP).

La DBP es uno de los problemas más importantes del prematuro. El oxígeno en altas concentraciones no sólo puede dañar los ojos, sino también los pulmones, lo mismo que la presión ejercida por los ventiladores, de modo que frente a cualquier infección viral estos niños se obstruyen más y tienen más sintomatología; de hecho, en las radiografías aparecen más atelectasias y fibrosis, aunque ésta no es permanente, por lo que se debe seguir algunas recomendaciones para evitar que vuelvan a requerir oxígeno. En primer lugar, se debe disminuir el riesgo de infecciones respiratorias que pudieran ocasionar hospitalizaciones, lo que significa que en los primeros dos años de vida no pueden asistir a sala cuna. Además, todas las personas que atienden al niño o lo toman en brazos deben utilizar mascarilla, al menos en los primeros meses de vida, especialmente en el período de invierno, más aun si hay un brote de VRS. Estas precauciones deben ser vigiladas en los niños, que son los que más trqnsmiten infecciones, y en las personas externas a la familia, a las que les cuesta entender que el niño es vulnerable y no se debe exponer a infecciones innecesarias. Lo mismo ocurre con el lavado de manos.

Se debe prohibir el tabaquismo en el domicilio, recomendar el uso de calefacción no contaminante y dar licencia maternal por 12 meses, incluso 2 años como se recomienda en algunas partes, y por 2 años en los casos de niños que están con oxígeno domiciliario. Casi 20% de estos niños se van a la casa con oxígeno y necesitan cuidados especiales en el domicilio, para lo cual se han desarrollado sistemas de hospitalización domiciliaria, los que permiten que el control del aporte de oxígeno lo realice personal auxiliar o una enfermera. Las cirugías electivas se deben postergar hasta los 5 a 6 meses de edad corregida.

A pesar de todo esto, es inevitable que presenten alguna crisis obstructiva y, cuando esto ocurra, en primer lugar se debe evaluar la respuesta a los beta agonistas (salbutamol); si el niño es hipersecretor, se puede utilizar la mezcla de salbutamol con el anticolinérgico ipratropio, alternada con salbutamol solo. Siempre se debe solicitar una radiografía de tórax, porque estos niños tienen tendencia a la atelectasia y siempre van a requerir Kinesioterapia.

Si el niño no responde a estas medidas, sigue obstruido o tiene recurrencias frecuentes, se deberá indicar el uso de corticoides inhalados (fluticasona) que reducen la frecuencia e intensidad de las obstrucciones y mejoran la respuesta al salbutamol. En las crisis obstructivas de difícil manejo, es decir, que no mejoran claramente con salbutamol, se recomienda agregar corticoides, igual que cuando son recurrentes. En un niño con DBP se debe iniciar el uso de corticoides en el segundo episodio, en especial si hay antecedentes familiares de asma. Se debe recomendar a los padres que cuando el niño se resfríe, comience a recibir los puffs de salbutamol apenas empiece con tos, sin esperar a que aparezca la dificultad respiratoria.

Se recomienda utilizar la vacuna anti influenza hasta los 6 años de edad en los niños más sintomáticos y en sus familias. Los anticuerpos monoclonales para VRS se utilizan en los contactos, cuando hay algún brote, dentro de las unidades de neonatología. A nivel ambulatorio, son muy pocos los niños que pueden acceder a esta medida de prevención, ya que se requiere una dosis mensual que se calcula por kg de peso; en consecuencia, a medida que los niños van creciendo, van requiriendo mayor cantidad. Cuesta al menos un millón de pesos por dosis y si el brote dura 3 a 4 meses, se necesitarían cuatro dosis.

Se recomienda controlar la radiografía de tórax a los 6 y 12 meses, y a los 2 años de edad, aunque se puede necesitar una radiografía mucho antes si el niño presenta síntomas; en el último chequeo no debe haber ninguna imagen pulmonar patológica. En todos estos niños se debe medir la función pulmonar mediante espirometría y test de metacolina, entre los 6 y los 7 años de edad, porque un grupo importante de ellos serán asmáticos.