Una síntesis a las miradas histórico- etiológicas del síndrome .
[FONT=Comic Sans MS][B]Una síntesis a las miradas histórico- etiológicas del síndrome . [/B]
La forma de ver esta enfermedad, a través de la historia, ha resaltado las ‘conductas extrañas’, de estos individuos y las ha diagnosticado, de acuerdo a lo propio de la época; por ejemplo, en la Edad Media, dicha enfermedad, vinculaba su causa, a razones espirituales y religiosas, pues literalmente se le veía como una “posesión”, tanto así, que el propio Tourette, se dice, que escribió una obra de teatro sobre las epidemias de posesiones diabólicas, fascinado así con la idea del fenómeno de la posesión.
Más adelante, la opinión generalizada, posteriormente a los estudios hechos por Tourette, fue el catalogar a estas conductas, no como una enfermedad orgánica, sino más bien como un problema de tipo “moral”, una expresión de malicia o debilidad de la voluntad, y esa era por lo tanto, la causa que debía tratarse para mejorar su condición moralmente impropia.
Desde la década de 1920, hasta 1960, la enfermedad era costumbre denominarla como psiquiátrica, que debía por lo tanto, tratarse mediante psicoanálisis o psicoterapia, pero esto (según Sacks) resultó ineficaz. Posteriormente con la demostración, a principios de la década del sesenta, de que la droga haloperidol, podía suprimir drásticamente sus síntomas, el síndrome de Tourette, fue considerado (bajo un repentino cambio de opinión) como una enfermedad química, el resultado de un desequilibrio de un neurotrasmisor, la dopamina, en el cerebro. [/FONT]