Pienso que nuestra vocación de servicio en este tema, esta siendo manipulada y malamente usada como un vil instrumento para mantenernos aletargados frente a los innumerables abusos sufridos por nuestra profesión, y asi cada vez q tratamos de despertar y darnos cuenta de ello, nos vuelven a cantar nuestra canción de cuna llamada “VOCACIÓN” y volvemos a caer en nuestro sueño de sumisión y abusos.
Es hora entoces que despertemos de verdad y comencemos hacer algo por nosotros mismos y por todos los profesionales de esta área que vendrán.
Respecto de buscarle una solución a este tema es que concuerdo en cierta medida con lo señalado por el presidente del colegio de abogados de Talca, al señalar, que se le deberia otorgar un grado de jurisdicción al colegio de abogados para que así y mediante finaciamiento público se pueda sustentar más fundaciones Pro Bono, a las que se integrarían todos aquellos profesionales que voluntariamente decidan participar en ellas, sin que esto signifique gasto alguno; Esta medida tendría entonces como fondo la extinción definitiva de los turnos gratuitos.
Respecto de las practicas profesionales tambien es un tema extenso a tratar y es aquí donde discrepo con la opinion del presidente del colegio de abogados, quien señala que se debería profesionalizar las corporaciones.
Por mi parte considero que la práctica profesional en las corporaciones forma parte de la columna vertebral en el desarrollo de un buen profesional, es por ello que no hay que atacar su obligatoriedad, si no el modo y las condiciones en que ella se realiza.
Tema que puede ser analizado in extenso, lo que ciertamente se hará.
Espero sus opiniones.
saludos.